A word by my soul...

La proyección de nuestros más grandes miedos...

martes, 20 de septiembre de 2011

CUANDO LOS SUEÑOS SANGRAN, ES PORQUE LOS HEMOS HERIDO CON EL INSULTO DE LA INCREDULIDAD...




Tú, que has nacido de la desesperación en mi alma,
Tú que has muerto cuando mi fe ha perecido en una peña demasiado filosa,
Tú que has despertado a la bestia moribunda que suplicaba por un poco de comida.
Aquella que enfermó cuando supe,
Que no existirías.
Y me cansé de esperarte.
Me cansé de aguardar a que el cáliz y su carne rosada se llenaran de una sangre que contuviera el fruto que serías;
Me he hartado de mendigar el amor de un ser que no está a mi alcance.
De un ser que ha nacido para ser una reliquia de la eternidad.
Pero a pesar de todo,
A pesar de los tiempos,
Sigo esperando,
Sigo aguardando a que nazcas,
Rogando que mil años no sean demasiados y que cuando hayas venido al mundo,
Aún puedas enamorarte de mí.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Bill Kaulitz

No tengo mucho por decir, salvo quizá que no he tenido tiempo para nada...

Porque??

Hace unos días, murió un amigo muy cercano de mi hermano...
Yo, la verdad lo vi una sola vez, todo un día...y eso fue todo lo que me bastó para recordarlo.
¿Por qué la gente buena muere de forma tan cruel?
¿Por qué Dios lo permite?
En ningún momento deseo desafiar, ni insultar, porque no, ese no es el objetivo.
El objetivo en si es encontrar algo, un algo que nos de un alivio; resignación, no, me nieog rotundamente, aceptación, tal vez, solo al hecho de que no volverá, pero, entonces, ¿Qué es lo que debemos hacer, y sentir cuando cosas asi pasan?
Él murió por huir de los que nos "protegen", el murió por culpa de alguien mas; él murio siendo joven y amado, él murió sin haber cumplido todos sus cometidos en la tierra...
´Si por pura casualidad alguien con el suficiente poder lee esto, piensa, piensa en cuanta gente dejaría de llorar si aquellos que van por las calles sintiendo que son dioses se detuvieran a pensar, y sintieran algo tan básico y tan relevante como la culpa.
Amen hasta que duela, digan que aman hasta que se les seque la lengua, pero nunca, nunca hagan daño.
Pensemos que DIos actúa de formas misteriosas, no porque estemos seguros, sino porque en nuestros corazones de mortales no existe la suficiente perfección y sabiduría como para conllevar algo tan cruel como esto. Pensemos que Dios actúa de forma misteriosa y que él sabe lo que hace y porque, porque solo así podremos seguir viviendo; porque es necesario que Dios en verdad sepa lo que hace, porque si el no lo sabe, que será de nosotros.
Elevemos una plegaria al cielo, porque en verdad confió en Dios, en que el lo protege, y sabe porque lo hizo, porque yo, yo no lo sé, yo no lo comprendo.
Lo unico que comprendo, es que él murió llevandose consigo el llanto de todos aquellos a quienes su corazón tocó. Él murió llevándose un pedazo de mi corazón entrelazado en el suyo. El murió, pero no dejó de existir.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Wounds


WOUNDS


Promete que no estarás cuando abra los ojos…
Promete que ya no dolerá la siguiente vez que me golpees.
Promételo
Porque si no es así, entonces me negaré rotundamente a seguir a tu lado
Aunque te amo, y tú sabes que es verdad.
Prosigue con la sátira que llamas vida.
Esta que me has obligado a ocupar.
Yo no quería vivir, no si iba a ser así.
Deje de soñar hace muchas noches, hace muchos cumpleaños
Y sin embargo todavía creo.
Creo en el cambio y en la mentira, vestida de verdad a medias.
No solo en el deseo inconcluso de tus noches sin remedio
Bésame solo una vez y regálame algo que sea solo para mí.
Será lo único que me llevaré a la tumba cuando haya cerrado los ojos.
Porque de verdad le traigo muchas ganas a eso, a cerrar los ojos por completo.
Por favor, dios, déjame ser feliz con eso que llaman egoísmo.
Déjame por una vez besar sus labios,
Sentir su abrazo y oírle decir “Te amo”,
Te juro que al día siguiente seguiré viviendo por los demás hasta el día en que tú decidas que deje de hacerlo.
Déjalo mentirme,
Hazlo que me mienta,
Y hazlo que me haga feliz…
Regálame un día completo para mí.
Ya no quiero morderme, porque los moretones se notan pero nadie los ve.
Nadie me dice que deje de hacerlo,
Porque a nadie le duele mi piel.
Nadie piensa que es cruel que me sienta de esa manera.
Nadie se detiene a mirarme, nadie lo hará.
¿Qué hago, Señor? ¿Qué hago para ya no sentir que me ahogo?
¿Cómo salgo a la superficie?
Olvídalo, ya no me interesa.
Siento la sedosa frialdad de mi indiferencia enrollarse alrededor de mi garganta.
Ella me ayudará a bien morir,
Gracias señora,
Gracias por mirar a donde nadie más se detenía a observar.
Ya no sentiré el calor de la ira, ya no sentirá tampoco alegría,
de esa falsa conmoción que nos envuelve cuando algo agradable pasa…
Ya no, porque me estoy apagando.
Con cada exhalación, un poco de mi se disuelve en la nada oscura de mi olvido,
 La muerte penumbrosa sujeta mis sueños, los estruja hasta hacerlos gritar, y lentamente sigue aplastándolos hasta que revientan en su palma, salpicando la sangre tibia de la vida que les inyecté mientras creí en ellos,
Mientras pensé que algo bueno saldría de creerlos.
Luego solo queda el silencio, un mutismo eterno que terminará solo cuando el tiempo lo haga.
Porque las decisiones vienen con consecuencias firmemente sujetas a su mano, y esta es la que yo he decidido tomar.
La que venía con el paquete.
Dame la mano.
Sigo cayendo y no sé a donde, pero sé que ya no será lo mismo, bueno, por lo menos el dolor será diferente, habrá una variación en el sistema de tortura, un calvario por otro.